Premio Cine y Audiovisuales
A la espera de saber si su ópera prima será una de las triunfadoras en los reputados premios cinematográficos Forqué y Feroz, Pilar Palomero ya ha recibido «con mucha alegría» el reconocimiento de ‘Artes y Letras’ a su trabajo en la dirección de ‘Las niñas’. «Esta es otra de las sorpresas agradables que me ha reportado la película», reconoce, mientras explica que ella ha sido y es una de las fieles lectoras del suplemento cultural de HERALDODEARAGÓN.
Acerca del éxito que está cosechando su primer largometraje, Palomero insiste en que «lo más importante es llegar a la gente». Objetivo que se ha cumplido con creces porque son muchas las personas que están valorando la película: «Especialmente en Aragón, donde las cifras de espectadores han sido extraordinarias. Tenemos mucho que agradecerles a las personas que han ido a ver la película», afirma la directora, quien destaca que, para muchas de ellas, ha sido la primera que han ido a ver tras el confinamiento, lo que ha provocado que todo el equipo viviera su proyección de forma especial.
De hecho, la cineasta reconoce que, con la llegada de la pandemia y la cancelación de la actividad cultural, no sabían qué iba a pasar con la película: «La estrenamos en la Berlinale y teníamos previsto participar en otros festivales que se cancelaron», señala. Sin duda, una puesta en escena a lo grande que dice mucho de la calidad de ‘Las niñas’ y de la trayectoria de su directora.
Pilar Palomero lleva mucho tiempo formándose: «Tenía claro que quería contar historias y la realización de cortos me transmitía esas sensaciones que yo buscaba». Gracias a sus tres primeros trabajos en pequeño formato, que como ella misma destaca, contaron con las ayudas procedentes de las instituciones aragonesas, tuvo claro a qué quería dedicarse profesionalmente.
Tras otros trabajos de corte más independiente, la zaragozana empezó a dar forma a una idea que llevaba mascándose desde hacía años y que ha aterrizado en la gran pantalla con ‘Las niñas’: «Quería reflexionar sobre la pubertad, contar cómo es el paso de la infancia a la adolescencia y hacerlo en esa sociedad contradictoria que era la España de los noventa». Mientras la rodaba, se centró en «hacer la mejor película posible, no en cómo iba a ser recibida» y, a tenor de los resultados, esta filosofía de trabajo ha funcionado muy bien.
Actualmente, Palomero está trabajando ya en otro largometraje que, en esta ocasión, aborda el tema de la maternidad. Concretamente, está escribiendo su guión.